¿Qué tienen que ver las aves con las emociones? Dos libros que enseñan a mirar el mundo con sensibilidad
A primera vista, El gran libro de las emociones y El gran libro de las aves parecen muy diferentes.
Uno nos habla de lo que sentimos por dentro.
El otro, de las criaturas que vuelan por el cielo.
Pero ambos comparten una misma enseñanza: la importancia de detenerse, observar y conectar.
El gran libro de las emociones propone un recorrido por distintas emociones, ayudando a niños y niñas a reconocerlas, nombrarlas y gestionarlas de manera saludable. Es una herramienta ideal para el trabajo emocional en casa o en el aula, acompañando desde la empatía y el juego.

Por su parte, El gran libro de las aves invita a explorar la naturaleza con curiosidad. Con ilustraciones llenas de vida y datos fascinantes, despierta el asombro y la observación atenta: dos habilidades clave para la regulación emocional y la calma interior.

Porque al observar el vuelo de un ave, también aprendemos sobre paciencia. Y al entender una emoción, aprendemos a volar un poco más livianos.
📚 Ambos títulos están disponibles — dos grandes aliados para acompañar la infancia desde la sensibilidad, la curiosidad y la conexión con el entorno.





